Por: Humberto Castillo Mercado
Morelia, Michoacán.– Lo que inició como una manifestación pacífica convocada por diversas universidades, entre ellas la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) y la Universidad Vasco de Quiroga (UVAQ), para exigir justicia por el asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manso, derivó en nuevos actos de violencia frente a Palacio de Gobierno.
El contingente, integrado principalmente por jóvenes de entre 18 y 24 años, partió después de las 13:00 horas desde el monumento a Lázaro Cárdenas y avanzó por la avenida Madero con rumbo al Centro Histórico. A la altura del Mercado de Dulces, algunas jóvenes, quienes se identificaron como estudiantes de la UVAQ y portaban megáfonos, aseguraron que la marcha no tenía vínculos con partidos políticos y anunciaron que ahí concluiría la protesta.
Sin embargo, otro grupo decidió continuar hasta Palacio de Gobierno, donde comenzaron a lanzar consignas e insultos contra el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla. A pesar de las mallas metálicas y protecciones colocadas en la fachada, los manifestantes arrojaron piedras y diversos objetos contra las ventanas del edificio, varias de las cuales ya habían resultado dañadas durante los hechos violentos del pasado domingo 2 de noviembre.
Un grupo de aproximadamente 30 jóvenes, entre ellos varias mujeres, retiró las vallas metálicas que protegían la puerta principal del inmueble. En respuesta, elementos de seguridad pública dispersaron a los manifestantes con gases lacrimógenos para evitar mayores daños.
Los negocios cercanos bajaron sus cortinas mientras decenas de participantes presentaban síntomas de intoxicación, irritación ocular y vómito. Aunque muchos se retiraron del lugar, otro grupo regresó minutos después para continuar con las consignas y lanzar objetos hacia los uniformados y el edificio, gritando frases como “¡Fuera Bedolla!”, “¡Corrupto!”, “¡Puerco!”.
Entre los presentes se encontraba una mujer de aproximadamente 60 años, quien dijo haber asistido tanto el domingo como este lunes a las manifestaciones. La ciudadana expresó su rechazo a los actos de violencia y aseguró que acudió porque la marcha se había convocado como una protesta pacífica. Consternada, relató que trató de disuadir a los jóvenes para evitar una nueva confrontación. “Les gritaba: ‘¡Ya váyanse, ya váyanse, porque los policías les van a volver a lanzar gases!’”, gritó consternada la mujer.
Luego los destrozos continuaron en el Palacio Legislativo, vidrios rotos y puertas dañadas.
La avenida Madero se convirtió en campo de batalla entre los reacios estudiantes que no se retiraban y un grupo de policías quienes lanzaban gases y balas de gomas, mientras que los estudiantes y manifestantes repetían con piedras, agresiones y mentadas de madre contra los uniformados.
En el Congreso Local los policías detuvieron a varios manifestantes.
Poco después de las 15 horas la confrontación entre policías y manifestantes no cesaba.
En la banqueta del Palacio Legislativo, kilos de vidrios rotos con patinetas quedaron esparcidos.
Los jóvenes, algunos sin playera no se retiraban y seguían mentando madres contra los uniformados.
«Hijos de su puta madre, así hubieran sido buenos para ir a cuidar a Carlos Manzo».

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