Ejidatarios de la Tenencia Morelos han interpuesto una demanda contra la Comisión Nacional del Agua (Conagua) tras sufrir pérdida total de más de 120 hectáreas de parcelas sembradas, viviendas y otras infraestructuras, debido al desfogue de la presa de Cointzio.

El presidente del Comisariado, Javier Aguilar Vidales, explicó que el desfogue inicial estaba programado para liberar 10 mil litros de agua por segundo, pero en realidad se liberaron 35 mil, lo que desbordó el río y provocó severas inundaciones en las áreas aledañas. Se estima que los daños económicos superan los 25 mil pesos por hectárea.

Este hecho, según Aguilar, nunca antes se había suscitado, y ahora los caminos a ambos lados del Río Grande se han convertido en canales con un alto nivel de agua. “Tenemos dos predios, La Alberca y El Frijolar, que están muy afectados. En El Frijolar ya está bajando el nivel del agua, pero en La Alberca, que abarca unas 65 hectáreas, hay hasta tres metros de altura de agua. Va a tardar en bajar y no podemos ni siquiera entrar”, señaló.

Por su parte, el presidente del Comité de Vigilancia, Homero Cervantes Rendón, informó que se realizó un recorrido para cuantificar los daños, acompañados de un notario que dio fe de los hechos. Detectaron que aproximadamente 120 hectáreas de cultivos de maíz y sorgo resultaron en pérdida total, además de casas habitación, bardas perimetrales y un balneario gravemente afectado en su infraestructura y equipo.

Cervantes indicó que han demandado a Conagua y exigen una compensación. “Ya hemos interpuesto la demanda. También enviamos un escrito al gobernador Alfredo Ramírez Bedolla y estamos en espera de una audiencia para continuar con el proceso”, explicó. Añadió que no han recibido apoyo de ninguna autoridad y que los gastos los han cubierto de manera independiente, como núcleo ejidal, para enfrentar a Conagua, el Estado, el Municipio y el Organismo Operador de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento (OOAPAS). “Tenemos que demandarlos para que nos hagan caso y podamos llegar a un acuerdo”, afirmó.

Actualmente, el comisariado cuenta con 134 ejidatarios, de los cuales se estima que el 50 por ciento resultó afectado, incluyendo los predios de El Frijolar, La Alberca, Las Juntas y Potrerillos. “Ya volvieron a abrir las compuertas de la presa, y el río está lleno”, lamentaron, además de mencionar la contaminación que ya se advierte por la gran cantidad de peces que quedaron varados.

El tesorero del Ejido, José Luis Silva, señaló que “el desfogue fue tardío y demasiado grande, lo que provocó que el río invadiera nuestros terrenos”. Ahora, dijo, están integrando el expediente con el apoyo de un notario. “Con un ingeniero y un dron obtuvimos las coordenadas de las zonas afectadas, para ver si se puede recuperar algo”, explicó.

Silva también mencionó que los caminos están inundados y que han utilizado maquinaria, costeada por ellos mismos, para intentar extraer el agua. Sin embargo, con el río tan alto, no han tenido éxito. Los ejidatarios están preocupados por las pérdidas y buscan que la Mesa Directiva gestione ante las autoridades una indemnización por la irresponsabilidad de las mismas.

El llamado de los integrantes de la Mesa Directiva del Comisariado Ejidal a las autoridades es claro: atender la situación, brindar apoyo y actuar en el marco de sus responsabilidades.